Good Will Hunting

Me gustan varios de los trabajos de Gus Van Sant, así que siempre espero bastante de el como director. Ayer “Good Will Hunting” me indico que tal vez no debería hacerlo.
Will Hunting es un joven de 20 años que tuvo una infancia de porquería y bastante problemático (también es un bocho, que puede resolver ecuaciones matemáticas muy complejas y al parecer se leyó una biblioteca entera). ¿Jóvenes con problemas? Van Sant esta en su salsa! Pero no, la película es muy correcta, y aunque eso no quiera decir que sea mala, si la hace obvia y un poco aburrido. Una decepción.
Tiene un par de actuaciones que están bastante bien (nunca me banque a Robin Williams y Ben Affleck actuando es de madera, por descarte me estaba refiriendo a Matt Damon y la chica). Lo mejor (lejos) es la banda sonora con temas del groso de Elliot Smith.
Nota 1: Si no me gusto esta, ni voy a hacer el esfuerzo con Finding Forrester.
Nota 2: Le tengo un poco de miedo a la nueva de Gus, Restless.

3 errores

Si hubiese escrito estoy ayer temprano, la situación que hubiera contado en este post habría sido totalmente distinta de la que voy a escribir ahora. Pero justo ayer a la tarde me sucedió algo que en principio me dejo muy incrédulo.
Estaba en el cine que hay acá en el centro de la ciudad. Los días de semana a la tarde siempre hay poca gente y la mayoría son señores y señoras de edad avanzada. En la hilera siguiente a la mía y un par de asientos hacia la izquierda había una señora (es el sujeto de esta historia, así que mejor llamémosla vieja de mierda, porque me hace sentir mucho mejor) que debía rondar los 70 años. Esta vieja de mierda cometió tres errores imperdonables:
1er. Error: En el medio de la película le sonó el celular (yo como un boludo compenetrado, al principio creí que el sonido venia de la película)
2do. Error: Atendió el celular! (estaba media sorda y hablaba fuerte)
3er. Error: Cuando la persona con la que estaba hablando le pregunto en donde estaba (uno puede suponer muy fácilmente que esta fue la pregunta) ella responde: "en el super". (Todavía no lo creo)
Entonces ahí me encontraba yo intentando prestar atención a la película mientras daba golpes en el asiento adelante mientras gritaba "Hey!" o "Oi!" (No se porque grite eso). Al parecer a todos los otros no les molestaba esta situación por que no dijeron nada. O tal vez como eran todos viejos la respaldaban a la señora por que también ellos alguna vez han cometido semejante conchudez.
(Una última vez: que vieja de mierda.)

Please Give

Dos cosas que concluí cuando termine de ver esta película:
- Como me gusta Catherine Keener, me agrada mucho verla en pantalla. Acá interpreta a una neoyorquina que tiene demasiados complejos con su vida, siente que las cosas que tiene no se las merece. Creo que es un papel que con otra actriz, podría haber sido un persona bastante caricaturesco, muy insoportable de mirar y escuchar, pero la mina logra componerlo de forma real y entrañable. Ella esta muy bien y la película también. Me hizo acordar bastantes a las películas de Woody Allen.
- Confirmo que Amanda Peet tiene el síndrome de Marisa Tomei. Tiene 38 y cada año esta mejor.

En el Supermercado

No voy mucho a los supermercados. Creo que es por eso que cuando voy no la paso mal. Lo recorro muy lentamente mirando todos los productos, los colores y los logos (una pelotudez bárbara, siento que soy como un bebe que cuando le ponen un móvil en la cuna se lo queda mirando por mucho tiempo y tranquilo).
Así que ahí estaba yo con mi cesto rojo el martes pasado recorriendo la góndola (que buen nombre para un águila) en donde están las galletitas y pensando por que alguien compraría oreos blancas. En un momento escucho la voz de una nena chiquita (por adivinar diría que tenía algo así como 5) que provenía del sector de la verdulería (a unos metros de donde estaba yo) que decía: abu, yo quiero frutillas, cómprame frutillas! Yo, que seguía en estado zombie, me quede mirando como la abuela le respondía que iba a comprarle pero primero quería ver cuanto costaban. La señora agarra una frutilla de toda la gran montaña, la lleva hasta la scanner que da los precios y pasa la frutilla por el censor. Al no recibir reacción de la maquina, la señora dice indignada: estas maquinas nunca funcionan!
Que paso después no lo se, (aunque tengo la teoría la señora se habrá ido a quejar con el encargado por que la maquina no le daba el precio de la frutilla o que armo un ejercito de señoras, con Linda Hamilton a la cabecera, que luchan contra las maquinas) aun en mi estado de zombie, la escena que me causo tanta risa, que no podía contenerla y tuve que volver rápido a esconderme a la góndola de las galletitas.

Aclaración: la abuela no era vieja, habrá tenido entre 55 y 60, así que no se puede su acción por condición de gagá.

How to Train Your Dragon

Las películas animadas que realiza Dreamworks no me interesan. La mayoría de sus productos apuntan más al público infantil con historias básicas llenas de lugares comunes, que al final dejan de lado todo tipo de metáfora o sutileza para dar el mensaje más obvio y subrayado. Usan el humor como principal atractivo en sus películas, con chistes que nunca logran divertirme. Siempre monosomía y repetición de guiones. Parece que no tuvieran ni un poco de ambición de hacer buen cine.
Ojo, Shrek me parece muy buena película, y la secuela esta dentro de todo bastante bien, pero ver 20 minutos de Madagascar (1 o 2), Shark Tale es una pérdida de tiempo. Ver Shrek 3 (completa!) me dio ganas de martillarme la mano.
A "How to Train Your Dragon" decidí darle un oportunidad por que después de ver el avance me pareció que tenia algo distinto al resto de las películas de Dreamworks. Mejor dicho, no parecía una película de ellos.
Mi impresión no estaba tan errada. La mejor parte de la historia es la del titulo. Las escenas donde Hiccup (el protagonista) entrena al dragón negro que cazo (de pura suerte) son entretenidas y simpáticas. Puntos a favor porque para crear el vínculo entre el dragón y el humano, los creadores se dan cuenta que no es necesario agregarle una voz a la criatura. Además funciona bien que estas escenas se mezclan con otras en contrapartida en donde Hiccup es entrenado para cazar y matar dragones.
Para mi alegría en casi todo momento logra evitar ese humor fácil que tenían las otras historias mencionadas. Tiene también un buen despliegue visual y una banda sonora, con influencias de música celta, que acompaña bien a esta comunidad vikinga.
Puntos flojos posee un montón (guión básico, una pena que la segunda mitad de la película es muy común, un protagonista con el peinado de Justin Bieber), pero no voy a hablar de ellos, esta vez se los perdono. Acá Dreamworks al menos muestra intenciones de hacer las cosas bien.
Ojala que sigan esta dirección.

Remera #12

o la satisfacción de cuando las cosas salen como uno quiere.

Friday Night Lights

Ya mencione a Lost varias veces en este blog, así que me parece injusto no mencionar a la otra serie que me excelente (además de que tengo ganas de escribir sobre ella).
Friday Night Lights no ocurre en una isla misteriosa, no tiene un monstruo en forma de humo negro, ni viajes en el tiempo y ni un pelado sabio. Lo que esta serie tiene son personajes tremendos y reales, además de unas historias que van mas haya de ser una buena idea, porque bien trabajadas. Todo ocurre en Dillon, un pequeño pueblito en Texas en el cual una de las cosas mas importantes son los partidos de futbol americano.
A mi me paso (y estoy seguro que a varios mas) de preguntarme ¿Para que ver una serie que trata sobre un equipo de futbol americano en Texas?¿Por que ver una serie en los protagonistas son un grupito de adolescentes bonitos, que probablemente tengan problemas salidos de telenovelas? o sino ¿porque ver ua serie que tiene imágenes promocionales como esta (o esta otra)?Realmente es difícil que uno se interese en esta serie por que lo que parece ser a simple vista (y por lo que el canal la intento vender).
Sí, ocho de los diez personajes son adolescentes bonitos, pero una vez que uno acepta ese dato superficial se encuentra con que cada uno tiene historia muy interesante. Todos tienen dudas en sus vidas, la mayoría tienen una vida de mierda llena de responsabilidades que uno no debería tener a esa edad. Todos están encerrados en un pueblo que odian, algunos quieren irse lejos y poder triunfar otros simplemente quieren salir de ese lugar. Y a lo largo de la serie vemos como van creciendo, trasformándose por diversas circunstancias, los vemos caer, levantarse y volver a caer mas abajo. La serie no teme en ser real y no concede a todos sus personajes un final con el que viven felices para siempre (por suerte no concede a ninguno este final). Las resoluciones tienden a ser agridulces o completamente tristes. (Sí la serie por momentos es un bajón, que yo ya aprendí a verla siempre, por las dudas, con un pañuelo en la mano).
Los otros dos personajes son los que aparecen en la foto de arriba, los personajes principales y la fundación de esta serie. El entrenador Eric Taylor y su esposa Tami. Creo que no hay forma de explicar la genialidad de estos personajes y su relación. Como se relacionan y ayudan a estos chicos, además de lidiar con sus propios problemas laborales, económicos y familiares entre otros. Voy a citar una amiga que enganche con la serie lo que dijo sobre ellos: "pasa que funcionan tan bien porque parecen una pareja real, discuten de las cosas que discuten mis viejos y de la misma manera que ellos". Mi amiga tiene toda la razón, mientras unos los ve, se olvida totalmente que estos personajes son ficticios. y lograr eso es un espectador me parece impresionante. Gran parte de este efecto se debe a las espectaculares interpretaciones por parte de Kyle Chandler (¿alguien se acuerda cuando este señor hace varios años recibía el periódico del día de mañana?) y Connie Britton. Juro que si estos dos actores hicieran una serie, que los mostrase a ellos dos (sin interpretar ningún rol) tomando un café y charlando por una hora, yo seria una persona muy feliz. Tienen una química impresionante, que por lo que vi y lei en entrevistas va mas mucho mas allá de sus trabajo delante de las cámaras. (Por fin este año los chotos de los Emmy se dignaron a nominarlos en sus roles protagónicos como bien merecido lo tenían).
Como mencione una de las cosas que tenía miedo antes de empezar a ver este serie fue el tema del futbol americano, que es un deporte que nunca me intereso en lo más mínimo. Los creadores aciertan en usar al futbol en forma de vinculo entre los personajes, y muchas veces se lo utiliza para avanzar las historia y generar situaciones entre los protagonistas.
Otras cosas muy cortitas que no puedo dejar de mencionar:
-La música: Explosions in the Sky, Jose Gonzalez, Daniel Johnston, The Flaming Lips Iron and Wine, y muchas mas genialidades
-Como tocan temas que ya hemos visto miles de veces en series o películas, pero siempre logran contarlo de una forma real y con la cual uno realmente puede vincularse
-No puedo dejar de mencionar las formidables actuaciones de los mas jóvenes, entre ellos Zach Gilford y Adrianne Palicki. Hasta algunos que empezaron siendo de madera (Amy Teegarden, Taylor Kistch) terminan logrando cosas tremendas.

Seguramente me olvido de algo, que después termine escribiendo en la sección de comentarios. Pero creo que ya me extendí mucho, pero mi cariño por este Devil Town no tiene limites y no quería dejar de darle este homenaje ahora que la fecha del inicio de su quinta y ultima temporada esta tan cerca (27 de octubre agendadisimo).

All the Right Moves

Hoy me desperté a las siete, como todos los días que tengo clases. Llovía bastante. Hice lo que hacemos todos (creo) a la mañana. Me higienicé, me vestí, preparé las cosas que tenía que llevarme y me puse a desayunar. Mientras tomaba mi té con leche de la mañana (que amargo lo mío), miraba la lluvia por la ventana. Ahí me pregunté: ¿Realmente vale la pena empaparme y chupar frío, para ir a una clase en la cual no voy a prestar atención? Termine el té, me lave los dientes y me fui a dormir.
Es muy raro que yo tome decisiones tan sabías.